El próximo jueves, 11 de abril, a las 18:00, se realiza otra conversación sobre oficios, en el Ateneo Comercial e Industrial de Loulé, en una iniciativa del Municipio de Loulé a través del proyecto Loulé Creativo. Esta vez la conversación será sobre el arte de trabajar el cobre y el latón, reuniendo antiguos y nuevos maestros para hablar y reflexionar sobre el pasado, el presente y las perspectivas de futuro para la caldera en Loulé y en la región.

Además de los calderos, se desafían otros conocedores y profesionales, en particular diseñadores, decoradores, arquitectos, para una reflexión sobre nuevas posibilidades de uso y nuevos productos.

Trabajar el cobre para producir piezas necesarias para la vida doméstica o incluso a la producción industrial es una actividad muy antigua. En Loulé, existían caldereros en los primeros años después de la conquista cristiana, una vez que el oficio aparece mencionado en el foral concedido a la Villa, por D. Alfonso III, en 1266.

Incluso la actividad minera tuvo aquí expresión. En la periferia de la franja piritasa ibérica que se extiende desde el Bajo Alentejo al El Andévalo y Rio Tinto, en Andalucía, el Municipio de Loulé ya registró en el pasado actividad minera en la explotación del cobre, como lo evidencian los registros de minería en el territorio interior del Municipio.

En el siglo pasado, las caldererías «Barracha,» Carrilho «y más reciente, la» Caldera Louletana «de Ilídio Marques que entró por el siglo XX, animaron y dieron a la ciudad de Loulé la sonoridad del martelar ritmado en el cobre y el latón, produciendo manualmente tachos, cacerolas, cataplanas, chocolate, alambiques, chimeneas y otras piezas.

Después del interregno de casi una decena de años, el oficio volvió a dar vida a la ciudad en 2017, en el espacio donde antes había funcionado la «Calderería Louletana» ya partir de la transmisión de saberes a un pequeño grupo de aprendices, a través de Analide Carmo que había llegado a maestro a los 26 años, después de 14 de aprendizaje en la «Calderería Barracha».

Compartir memoria, conocimientos y reflexión sobre el pasado, el presente y el futuro de la caldera es el principal objetivo de esta iniciativa que se inscribe en el componente de promoción de las artes y oficios del proyecto Loulé Creativo.